lunes, 28 de diciembre de 2009

Albert Einstein


Se producía un eclipse solar muy esperado el 29 de marzo de 1919. Había un científico alemán, un tal Albert Einstein, que se atrevió a desafiar a la comunidad científica de la época. Había en Brasil y en África occidental (islas) grupos de astrónomos con sus cámaras y listos para fotografiar las estrellas en cuanto el Sol quedara oculto detrás de la Luna. Según ese tal Albert Einstein la trayectoria rectilínea de la luz de las estrellas se vería alterada debido a la masa del Sol. Esto haría que su trayectoria se doblara hacia el astro. Las fotografías estaban hechas, sólo faltaba comprobrar que la "posición" de las estrellas había cambiado comparando dichas fotografías con las de la misma región estelar sólo que tomadas de noche, es decir, con el Sol bien lejitos. La posición había cambiado. Así se demostró que la luz es algo material y no inmaterial como se creía hasta entonces. Se había comprobado una de las muchas teorías del mayor genio de la historia. Hoy día se siguen comprobando teorías de Albert Einstein.

Albert Einstein nació en Alemania el 14 de marzo de 1879. Tuvo dificultades para empezar a hablar y sus padres llegaron a pensar que era retrasado mental. En la educación secundaria no era un estudiante brillante y se aburría con los métodos de enseñanza de la Alemania de la época. Einstein cuando era joven partió hacia Zurich donde se matriculó y donde salió a luz su insólito talento para las matemáticas y para la física. Einstein no encontró empleo docente en ninguna universidad pero logró un puesto en la oficina de patentes de Berna. Allí encontró un lugar donde estudiar y pensar. Pensó por ejemplo en la opinión que tenían los físicos acerca de la propagación de la luz. Los físicos pensaban que la luz se propagaba en el espacio vacío y que utilizaba como soporte una sustancia llamada éter. Este éter ocuparía todo el espacio y a través de su vibración se producirían las ondas luminosas. Se pensaba también que, tomando como punto de referencia el éter, se podía medir el movimiento de la Tierra.

Había habido otros descubrimientos en aquella época como el del polonio y el uranio, sustancias que emitían cantidades ingentes de energía ¿De dónde salía? ¿ Tal vez habría que derrumbar el edificio establecido de la física? En 1905, a la edad de 26 años, Einstein publicaba un libro con sus ideas acerca de todas estas cuestiones. En ese libro exponía que la velocidad de la luz es constante y que no puede existir ni movimiento absoluto ni falta absoluta de movimiento. Decía también que materia y energía son dos partes de la misma cosa y que la materia se puede convertir en energía y viceversa. Esto hizo que Einstein adquiriera fama y en 1909 le valió una cátedra en la Universidad de Praga y en 1913 fue nombrado director del nuevo instituto de investigación de Berlín, el Instituto de Física Kaiser Wilhem. En 1915 publicó un artículo en el que exponía nuevas ideas acerca de la fuerza gravitatoria. En 1921 recibió el premio Nobel de Física fruto de una explicación lógica al efecto fotoeléctrico y por sus teorías del movimiento browniano.

Einstein se mantuvo en Estados Unidos en la época de reinado nazi. En aquella época trabajó en el Instituto de Estudios Avanzados de Princeton, New Jersey. Enrico Fermi comenzó a bombardear elementos con una partícula subatómica recién descubierta, el neutrón. Al bombardear uranio se liberaba una cantidad de energía muy superior que con la radiactividad (esto lo descubrieron otros científicos y no Enrico Fermi). Einstein mandó una carta al presidente Roosevelt diciéndole que la bomba atómica era una posibilidad real debido a este hallazgo.

Einstein murió el 18 de Abril de 1955. Hasta ese mismo día urgió al mundo a llegar a algún acuerdo que desterrara para siempre las guerras nucleares.

Redes: programados para creer


El 27 de septiembre de 2009, Redes, de Eduard Punset, emitió un interesante programa en el que se nos muestra cómo la forma que nuestro cerebro tiene de ver e interpretar la realidad hace que estemos "programados para creer". Vamos, dicho mal y pronto, destinados o, según algunos, condenados a creer en cosas que se escapan a toda lógica, a toda razón, a todo empirismo, a la ciencia misma. Y es que el pensamiento mágico es probablemente el elemento que más nos diferencia de los animales irracionales. Aunque visto lo visto, eso de que esos animales sean irracionales aún está por ver. Os dejo el enlace al programa:

sábado, 26 de diciembre de 2009

¡Felices Fiestas!


Ahora que estamos a caballo entre la Navidad y la Nochevieja, quería aprovechar para desearos unas felices fiestas: ¡Feliz Navidad y próspero año nuevo!

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Como hace relativamente poco ya hice un pequeño balance del último año en nuestro primer aniversario, no quiero entretenerme demasiado en repasar lo que ha significado el 2009 para este blog. Sin duda, la mayor y más reciente novedad ha sido la incorporación de Miguel, que ha sido muy satisfactoria. Gracias a él y a un pequeño esfuerzo por mi parte, el blog va ganando en diversidad de contenidos. Espero contribuir a una constante renovación de los temas que hagan de este blog una plataforma dinámica sobre la actualidad y la cultura.

Un saludo a todos y mis mejores deseos para 2010.

martes, 22 de diciembre de 2009

Prohibido fumar: la libertad y el derecho a la salud


La cuestión que se ha suscitado sobre la prohibición de fumar en todos los espacios públicos cerrados debe plantearse como un conflicto entre dos valores fundamentales, a saber, la libertad y el derecho a la salud.

Toda restricción de la libertad sólo puede justificarse en la medida en que la acción concreta prohibida lesione los derechos de los demás. En todos los demás casos, la soberanía del individuo sobre sí mismo es absoluta. Así lo planteaba John Stuart Mill en “Sobre la Libertad” (“On Liberty”, 1859) y ésa debe ser, a mi modo de ver, la línea que delimite en qué punto es legítima la intervención de la sociedad o del Estado sobre las conductas de los individuos. Partiendo de esta premisa, el conflicto se plantea en el momento en que un fumador atente contra el derecho a la salud de los demás. En ese caso, la intervención del Estado mediante la prohibición de fumar sí estaría justificada y sería legítima. Lo cierto es que la costumbre ha permitido hasta hace pocos años que quien quisiera, en abuso de su libertad, fumara en perjuicio del resto en cualquier espacio cerrado. Eso ha ido cambiando progresivamente. Sin embargo, aún existen espacios de impunidad para ese abuso. La nueva ley busca acabar con esto.

No obstante, si bien es loable que las autoridades públicas quieran proteger nuestro derecho a la salud, no deben excederse en su protección hasta el punto de prohibir que se habiliten zonas especiales para fumadores en aquellos lugares en los que el espacio lo permita. Es cierto que, a falta de zonas especiales, la norma debe ser la prohibición de fumar aunque eso no obsta la búsqueda de soluciones intermedias que satisfagan ambos derechos. Lo ideal sería que quien quisiera pudiera fumar sin que los demás fueran molestados, pero esto parece que ya no está en la agenda del Gobierno. Tal vez desconfíen de la eficacia de una norma tan permisiva en el país creador de la picaresca o simplemente recelen de la libertad de los ciudadanos y crean más apropiado imponer en todos los casos, sin ambages, al nuevo tirano de nuestro tiempo: nuestro propio bienestar.

sábado, 19 de diciembre de 2009

Contestación al artículo de Manuel Pastor 'Notas sobre un coloquio en el círculo de Bellas Artes'

Lo prometido es deuda y el miércoles 11 de noviembre quedé en comentar un artículo de Manuel Pastor publicado en Libertad Digital sobre la mesa-coloquio del Pensamiento liberal en la actualidad que tuvo lugar en el Círculo de Bellas Artes de Madrid el pasado día 3 del mismo mes. Así y confiando que hayáis leído ese artículo, voy a citar y a comentar alguna de sus partes.

Comienzo con la siguiente cita de Manuel Pastor: “Irene Lozano, colaboradora de ABC, es una mujer joven con evidente talento, pero Vargas Llosa tuvo que matizar y corregir algunas de sus opiniones un poco excesivas o radicales acerca de la democracia liberal.”
Irene Lozano intervino para decir que la democracia española estaba secuestrada por lo partidos políticos y que, por ello, no tenía la impresión de estar verdaderamente en una democracia. Lo que yo entendí de sus palabras fue que los partidos actuales hacen imposible una verdadera representación de los ciudadanos. Sin embargo, Vargas Llosa, prevenido por la posible mala interpretación que podía hacerse de ese mensaje advirtió del peligro de pensar que la democracia es posible sin partidos políticos y que éstos son la causa de todos los males del sistema porque, añadió, que algunos políticos lo habían empleado para imponer sistemas autoritarios personalistas. A continuación, Irene Lozano se prestó a aclarar que su mensaje no había ido contra los partidos como institución, que ella cree necesaria, sino contra los partidos que actualmente monopolizan y, de hecho, impiden el acceso al poder de los ciudadanos. Luego no creo que se diera tal corrección sino tan sólo una aclaración.

Más adelante en su artículo, Manuel Pastor dice: “Tampoco nadie objetó nada a que Lozano mencionara como modelos liberales a John Stuart Mill en su etapa final, pese a que él mismo hablaba entonces de 'socialismo liberal'”.
Una vez más rezuma la animadversión que algunos liberales vestidos de conservadores destilan hacia este autor, que no tuvo tapujos en defender con una coherencia y una formación formidables el liberalismo político clásico, esto es, un liberalismo progresista, laico y que defiende un cierto, pero limitado papel del Estado, no su extinción, como haría un marxista o un anarquista. Resulta extraño que Manuel Pastor quiera negarle al Mill tardío el calificativo de liberal. Sería de agradecer que nos comentara con más detalle en qué aspectos concretos reniega de toda su obra anterior en la etapa última de su vida. Por lo demás, no entiendo que quiera negarle el apodo de liberal por lo que califica de obsesión de Mill por promover el aborto libre porque esto no se contradice con el liberalismo. Esa postura precisamente amplía las libertades de la mujer si bien a costa del derecho a la vida del no nacido. Todos los argumentos que se exponen contra el aborto no se basan en su beneficio para la libertad sino precisamente en una restricción de una libertad que se entiende desmedida en virtud de otras consideraciones morales.
En cualquier caso, ya se sabe que a muchos les cambia la cara cuando oyen hablar de progresismo y laicismo porque verdaderamente no creen en la libertad sino en la tradición y esperan la menor ocasión para salir en defensa de los símbolos religiosos en edificios públicos (siempre que sean sus símbolos, no los de los demás).

En el párrafo siguiente avanza diciendo: “José Varela dijo cosas correctas (referencias a Burke y a los Founding Fathers norteamericanos; responsabilidad del intervencionismo político en la crisis financiera mundial)”.
Efectivamente, José Varela parecía representar ese liberalismo arcaizante y encorsetado que aún conserva las orejeras y no ve más allá de los dos o tres asuntos clásicos que, si bien son imprescindibles, se muestran claramente insuficientes al tratar otros temas. De ahí creo que proviene la alabanza de Manuel Pastor que debió de sentir auténtica empatía con este personaje. Por otro lado, si bien le reprocha a sus intervenciones el “tono profesoral (prolijo y aburrido)”, yo las encontré de lo más interesante.

Seguidamente, después de elogiar a Savater, dice: “Savater no es exactamente un liberal, sino un libertario perteneciente al linaje de Voltaire y Nietzsche (conviene recordar que éste dedicó una de sus obras al primero, del que siempre fue admirador), excesivamente afrancesado y polimorfo. En un momento del coloquio llegó a proclamar, ante el regocijo de los asistentes, que él, cuando muera, no quiere ir al cielo, sino a Francia, cosa –pienso yo– que tiene bien fácil incluso en vida (aunque ahora parece que tiene dudas acerca de Sarkozy). Ese afrancesamiento le hace ser a veces un poco jacobino y muy anti-católico ("protección social y educación a cargo del Estado", "prohibición de la educación en casa", "fuera crucifijos de las aulas"), lo que se compadece muy poco no sólo con el auténtico liberalismo, sino con el libertarismo. En él vemos claramente a un representante de esa tradición ilustrada francesa, progresista, tan diferente de la escocesa-inglesa-americana, liberal-conservadora; esto es, a un volteriano más que a un tocquevilliano.”

Los que me conocen bien saben que me he revuelto en la silla al leer este párrafo. Una vez más el articulista se desenmascara: le reprocha a Savater su pertenencia al “linaje de Voltaire y Nietzsche” y que le haya dedicado al primero uno de sus libros. Tampoco muestra especial satisfacción con su “afrancesamiento” ni con el regocijo manifestado por el público ante sus jocosos "últimos deseos". Continúa diciendo: “Ese afrancesamiento le hace ser a veces un poco jacobino y muy anti-católico” y remata que representa a la tradición ilustrada francesa, progresista, que es más un volteriano que un tocquevilliano. ¡Vaya novedad! Pero aquí volvemos a ver lo de siempre. ¿A qué viene esa fascinación por lo anglosajón? No precisamente viene de su liberalismo sino más bien de su tradicionalismo porque los países del precedente vinculante han sido y son más lentos en adoptar cambios que permitan una mayor libertad de los individuos, si bien luego han estado más asentados, y, especialmente, porque la tradición anglosajona está hermanada con la religión y reñida con la laicidad del Estado. Lo mejor de la tradición francesa ilustrada es precisamente lo que más critica el articulista: su condena de la superstición, del oscurantismo y del fanatismo religioso así como su defensa de la tolerancia, que fue fundamental para implantar esa libertad religiosa en la que muchos aún no creen en occidente... Manuel Pastor no critica la excesiva burocratización de Francia, el intervencionismo de la República francesa en la economía, ¡no! Critica la tradición laicista republicana y, con ello, revela un tradicionalismo religioso que, parafraseándole, se compadece muy poco con la libertad.

Por último, sobre Vargas Llosa afirma: “Vargas Llosa comparó a los liberales con los trotskistas en su fatal tendencia al sectarismo y la disidencia. Detecté en Vargas Llosa una ligera alergia o temor a que se le identificara con los conservadores, pero él mismo reconoció su admiración por Margaret Thatcher. Hizo también alguna afirmación general excesiva, como que todo nacionalismo es un peligro y que siempre es mejor la peor de las democracias a una dictadura benevolente.”

No creo que la comparación con los trotskistas fuera un reproche a los liberales sino más bien un elogio por su parte porque creo que lo contrario, esto es, el liberalismo como una ideología uniforme y monolítica es lo que más le asusta. Por otro lado, Vargas Llosa no es conservador ni liberal-conservador sino simplemente liberal, de la tradición política clásica, y se ha desmarcado públicamente en muchas ocasiones, entre ellas, en la presentación del nacimiento de UPyD del conservadurismo que él no considera liberal. Por lo demás, la defensa que hizo Vargas Llosa de la democracia, además de ser cierta, es muy elogiosa porque, como demuestra el propio Manuel Pastor, para algunos la democracia no es un fin en sí misma sino un medio.

Sobre esto, dice en su párrafo final: “Creo que hay que diferenciar el nacionalismo liberal, integrador, de los nacionalismos étnico-culturales, excluyentes. Por otra parte, en teoría, es decir, en un sentido conceptual abstracto, es fácil ponerse siempre del lado de la democracia, pero la realidad es más compleja, y, en un sentido histórico concreto, por ejemplo, la dictadura constitucional de Lincoln ante la rebelión confederal fue necesaria para evitar males mayores”. Y continúa más adelante: “Para el liberalismo lo sustancial es la libertad –o las libertades–, y la democracia es lo adjetivo y procedimental; es decir, que no toda democracia vale: no vale, por ejemplo, la que destruye las libertades.”

Comparto parcialmente lo que Manuel Pastor aquí quiere reflejar, pero añadiría que para un liberal la democracia no es el gobierno de la mayoría sino el gobierno limitado de la mayoría y, por lo tanto, para un liberal es imposible que haya una democracia si una mayoría parlamentaria o un presidente nombrado en sufragio directo tienen poderes ilimitados, desproporcionados o incontrolados de los que se derivarían consecuentemente una restricción de la libertad. Si esto fuera así, estaríamos ante una dictadura de la mayoría y entonces ya sí sería discutible decidir, según el contexto histórico, si nos agrada más que el tirano sea el pueblo o que lo sea una facción o partido minoritario. Manuel Pastor, por contra, da a entender que puede haber democracias que sí restrinjan las libertades, es decir, dictaduras de la mayoría. A mí personalmente me desagradan todas las tiranías y entiendo que la única solución honorable en ese caso es la resistencia civil. Creo, por lo tanto, que lo que se ha dado en conocer como democracia liberal siempre es preferible a la mejor de las dictaduras y considero que éste era el sentido en el que hablaba Mario Vargas Llosa. Cualquier discurso de componenda con la dictadura es muy peligroso, especialmente en la medida en que ayuda a menoscabar la democracia que los liberales supuestamente estamos dados a defender sea el gobierno del color que sea.

Por otro lado, su defensa del nacionalismo liberal integrador me parece una contradicción en sus propios términos puesto que todo nacionalismo es "per se" excluyente. El hecho de que tenga un menor componente étnico o cultural no excluye que, finalmente, ese nacionalismo se salde con alguna restricción de la libertad, por ejemplo, de la libertad económica de comerciar libremente sin fronteras. Si para él es integrador el nacionalismo en virtud del cual los europeos y norteamericanos estamos protegiendo nuestras industrias y explotaciones agropecuarias de la libre competencia internacional, me temo que manejamos distintos significados acerca del adjetivo “integrador”.

Finalmente, vuelvo a destacar que el coloquio me pareció sumamente interesante y que ha sido un placer poder confrontar los puntos de vista de dos vertientes tan encontradas del liberalismo. Agradezco por ello a Manuel Pastor la publicación de su artículo.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Caso Haidar: un espectáculo bochornoso de nuestra clase política


Aminetou Haidar lleva ya más de un mes en huelga de hambre. Se trata de una lucha pacífica por su derecho a regresar a su país, el Sahara occidental, que, además, está ocupado por una potencia extranjera, Marruecos, que no deja de ser una monarquía despótica que vulnera los derechos humanos más elementales. Es una lucha legítima y ejemplar por un derecho que le es propio frente a un gobierno que lo vulnera arbitrariamente y, sin embargo, ¿cuál es la actuación de nuestra clase política?

El Partido Popular, adalid de los derechos humanos y de las libertades individuales, sigue empeñado en repetir la coplilla de que la culpa es de Zapatero por haberla dejado entrar en España ¡por razones humanitarias! Hubiera sido mucho mejor haberla dejado “encarcelada” en la zona internacional del aeropuerto del Aiún, claro está. Por si fuera poco, están empecinados en que se le alimente de forma forzosa. ¡Menos mal que son “liberales”! Sin duda el PP está completamente perdido. Ignora el alcance y la importancia de las razones de la lucha de Haidar... Parece ajeno a toda tradición de lucha por la libertad y revela su verdadero rostro conservador. Por otro lado, el gobierno, ejemplo de cómo no hay que trabajar, se pierde y se vuelve a perder en cierres en falso y para cuando empieza a hacer importantes gestiones internacionales se pone en evidencia: Zapatero ha destruido todo el prestigio internacional que tanto les costó conseguir a González y a Aznar. Volvemos a ser el enano internacional que éramos gracias al aislacionismo franquista y ahora nos es imposible conseguir un mínimo de presión diplomática por parte de Francia o de EEUU sobre nuestro vecino del sur, para el que no hemos ahorrado en alabanzas desde hace seis años. Y, por si fuera poco, el orgullo del ejecutivo se ve herido ante las peticiones del “amigo” mundo de la cultura para que actúe el Rey.

Mientras tanto, la causa de Aminetou Haidar parece cada vez más una causa perdida, tan perdida como la del propio Sahara. La ex-metropoli es completamente inoperante tratando de salvarla y sus políticos apenas son capaces de pactar una resolución en el Congreso con la abstención de la oposición: todo un espectáculo indigno del esfuerzo de Aminetou.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Mi vecino Totoro- Hayao Miyazaki


Muchos habréis oído hablar del genial director de cine de animación Hayao Miyazaki, puntero del estudio japonés Ghibli. La mayoría de los que estáis leyendo esta entrada no habéis visto la película, o al menos eso creo, dado que salió hace poco en España. Os recomiendo en primer lugar que la veáis porque es probablemente de las tres mejores películas de animación y una de las quince mejores películas en general. Pasaré a contaros la sinopsis:

Mei y Satsuki son dos hermanas que se mudan con su padre a vivir a una cabaña en el campo. Un día, por casualidad, la más pequeña descubre la existencia de los totoros: espíritus guardianes del bosque que sólo los niños de corazón puro son capaces de ver. Junto a estas entrañables criaturas y al gatobús, Mei y su hermana descubrirán el verdadero valor de la amistad, del amor y de la familia en una maravillosa e inolvidable aventura que les llevará más allá de su imaginación.

Fuente: Aurum.

A partir de aquí los que no hayáis visto la película no leáis.(Recomendación).
La película es, para mí, una obra maestra. Esta película, como casi todas las de Miyazaki, rebosa bondad, ecologismo y buena fe. Y pensad en lo que esta película predica del cuidado del medio ambiente. Para que luego le den el Nobel de la Paz a Obama.

Trailer.-

domingo, 13 de diciembre de 2009

Escandalosa actuación de la policía danesa


Al parecer, ayer tuvo lugar una detención preventiva masiva en Copenhague para supuestamente evitar disturbios durante una marcha ecologista. La verdad es que la noticia es escalofriante y ver las imágenes... En fin, no parece una escena de la europa democrática. Yo pensaba que sólo en Irán, China, Corea del Norte, Cuba o Birmania, entre otros, practicaban eso de las 'detenciones preventivas' ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar? Y, lo peor de todo, ¿cómo puede jactarse el portavoz de la policía de que no pedirán perdón?

viernes, 11 de diciembre de 2009

La mayor inundación del planeta formó el mediterráneo.


Aquí os dejo un enlace a un artículo muy interesante sobre la formación del Mediterráneo y sobre su verdadero periodo de duración. Esta duración, en cuanto a tiempo geológico, no es nada.

Vuelve el federalismo

Entre octubre y noviembre, Carlos Martínez Gorriarán ha promovido un interesante debate sobre el federalismo en España que finalmente vuelve a la primera línea de la política nacional de la mano de UPyD después de que su primer Congreso aprobara una ponencia en este sentido y de que Joan B. Culla i Clarà criticara en un artículo de El País (“Vuelve el Estado macho”) lo que considera el jacobinismo de esta formación política (según el cliché catalanista clásico, jacobinismo es igual que centralismo).

El debate está servido, cosa que me encanta. Lo cierto es que los artículos de Martínez Gorriarán iban bien encaminados en esa línea federalista clásica que se aleja del disparatado federalismo asimétrico que es una pura contradicción en términos además de un eufemismo de confederalismo, que es lo que de verdad quieren algunos en Cataluña y lo que están consiguiendo con este autonomismo manirroto. Yo ya me manifesté a favor de un Estado federal en mi entrada “Sobre la conveniencia de una España federal”. Aunque, como siempre, el problema es la ignorancia y la mala imagen que pesa sobre el término en este país. Por ello, aplaudo que UPyD vaya a hacer una labor tan importante de divulgación y apoyo del federalismo que, en cualquier caso, debe venir de la mano de otras reformas esenciales como la de la ley electoral, pero esto es otra cuestión...

Ir a artículos de Carlos Martínez Gorriarán:

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Segundo vídeo de la mesa-coloquio sobre el pensamiento liberal en la actualidad

El pasado miércoles día 11 de noviembre publiqué una entrada con un vídeo editado por la Fundación Progreso y Democracia en el que aparecía el primer turno de intervenciones de cuatro ponentes de lujo, de izquierda a derecha: Irene Lozano, Mario Vargas Llosa, Fernando Savater y José Varela. Recientemente ha aparecido en la web de UPyD un nuevo vídeo con una segunda parte. Recuerdo que el tema del coloquio era el pensamiento liberal en la actualidad y en esta parte ya sí que entran de lleno en materia. Lo recomiendo. Por cierto, sé que aún debo contestar al artículo que sobre este coloquio publicó en Libertad Digital D. Manuel Pastor. Espero hacerlo en unos días aunque aún sigo esperando a que cuelguen el coloquio completo.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

¡Ponme un pollo con la bandera!


Un obispo celebra una misa en Paracuellos con símbolos franquistas

El País. 2 de diciembre de 2009

Esta noticia dice mucho de dónde están todavía algunos: en el guerra-civilismo más absoluto y en la nostalgia de los tiempos del "bajo palio". Una cosa es que se recuerde a las víctimas de la guerra civil española y otra muy distinta que se haga exhibición de símbolos de un régimen opresor y tiránico como el franquista, que fue asentado precisamente sobre los cadáveres de, entre otros, las víctimas a los que ellos dicen homenajear y con el que, casualmente, la iglesia de Roma mostró una connivencia escandalosa. En fin, es este tipo de noticias que nos recuerdan que, si por algunos fuera, aún seguiríamos soportando ciertos yugos. Menos mal que son pocos y están desorganizados.

martes, 1 de diciembre de 2009

El hombre como animal social y su inteligencia


El 22 de noviembre Redes emitió un programa "fascinante" titulado "Macacos y humanos" que arroja datos interesantes sobre cómo interactuamos los humanos en sociedad y la influencia que esto ha tenido en el desarrollo de nuestra inteligencia. Se hacen alusiones importantes a la importancia del poder y de la familia en nuestra sociedad, al igual que en la de los Macacos, al tiempo que se hace una llamativa reflexión sobre la divergencia de papeles de los sexos en una y otra sociedad.

Aprovecho la ocasión para agradecer a Eduard Punset la importantísima labor que desarrolla como divulgador científico no sólo con este programa, que es todo un referente, sino por todas sus publicaciones y entrevistas. Trataré de darle un espacio en este blog.